El Día Mundial de la Salud Mental es uno de los momentos más importantes para nuestro colectivo, ya que es una oportunidad para hacer visible la salud mental, que históricamente ha sido marginada, pese a su alta incidencia: 1 de cada 4 personas sufrirán a lo largo de su vida una enfermedad mental. En Primera Persona, la única federación en España autogestionada por usuarios de Salud Mental y que engloba a 11 asociaciones andaluzas, celebramos el martes, 8 de octubre, la Jornada en Defensa de los Derechos Humanos en Salud Mental. El evento, realizado en el Hospital Universitario Virgen del Rocío de Sevilla y que tenía como objetivo de tratar este tema tan esencial desde las dimensiones jurídica, social y sanitaria, reunió a más de cien asistentes.
Durante cinco horas, el aula magna del Edificio de Gobierno de este centro hospitalario fue el escenario para profundizar en la idea de cómo los Derechos Humanos sirven para garantizar la igualdad y la no discriminación, así como mejorar el respeto a la dignidad y la intimidad.
María Dolores Romero, secretaria de En Primera Persona, abrió el turno de los conferenciantes con la presentación del trabajo que desde la Federación se está realizando sobre Derechos Humanos a través de una reflexión sobre qué supone la Convención de la ONU y planteando como retos la toma de conciencia de la vulneración de los derechos y la importancia de la visibilidad de las personas con enfermedad mental dentro del colectivo de personas que sufren una discapacidad. Romero también hizo hincapié en la necesidad y urgente promoción del conocimiento de los DDHH y de la Convención de Derechos de las Personas con Discapacidad entre el colectivo de personas con enfermedad mental, los profesionales, familias y demás intervinientes (legisladores, gestores, medios de comunicación…) La secretaria de la Federación apostilló como se deben facilitar los cauces para exigir el cumplimiento de los derechos y las vías de reclamación cuando la vulneración se produzca para terminar su intervención. Igualmente, toda su intervención giró en torno a la sensibilización para combatir el estigma.
La realización de esta jornadas, en colaboración con la Escuela Andaluza de Salud Pública, el Programa de Salud Mental del Servicio Andaluz de Salud y la UGC de Salud Mental Virgen del Rocío, contó con una mesa redonda sobre la ‘Defensa de los derechos humanos en salud mental’, en el que trataron las posibles vulneraciones de estos derechos en los diferentes dispositivos de hospitalización y recursos residenciales.
Desde el punto de vista de profesionales de salud mental, Manuel Cabrera, enfermero de Salud Mental de la Unidad Terapéutica de Jaén abogó por el derecho a la seguridad y el trato digno de pacientes, pero también planteó muchas preguntas del trabajo que se realiza en los recursos de salud mental. Dejó en el aire cuestiones sobre prácticas habituales y recurrentes, y subrayó la contención mecánica y el ingreso involuntario como dos puntos a debatir en profundidad.
Por su parte, Reyes Muñoz, responsable del programa Residencial de Faisem en Sevilla, explicó cómo se trabaja en los dispositivos de Faisem, cumpliendo con la norma y esforzándose por mejorar ante las demandas de usuarios
Margarita Laviana, psicóloga clínica y coordinadora de la Unidad de la Comunidad Terapéutica de Salud Mental del Hospital Virgen del Rocío, por su parte, habló en clave positiva sin dejar de lado el pensamiento crítico, con el objetivo de trabajar por la recuperación, de forma coordinada y cooperando, y siempre con el usuario como centro de todo el sistema y las intervenciones.
El aspecto sanitario continúo con a cargo de Vicente Ibáñez Rojo, psiquiatra y responsable Hospital de Día Torrecárdenas, Almería, quien trató “El Derecho a la Participación” y trazó las claves sobre la necesaria participación de las personas con enfermedad mental tanto en las políticas sanitarias como en la toma de decisiones sobre la asistencia y en todo lo que les afecta como usuario. Ibáñez mostró las claves sobre la necesaria participación de las personas con enfermedad mental tanto en las políticas sanitarias como en la toma de decisiones sobre la asistencia y en todo lo que les afecta como usuarios.
Concepción Toro Rosales, abogada y miembro del Foro Bienestar Mental de Andalucía, cerró la tanda de conferencias con la presentación “Implicaciones de la Convención de la ONU de Derechos Humanos de las Personas con Discapacidad, para las personas con enfermedad mental”. La especialista aportó una novedosa perspectiva desde el punto de vista de una jurista, que fue muy apreciada por el público. La abogada insistió en que hay que reclamar los derechos tanto como ciudadanos de España como de Europa, y que hay que empoderarse y no permitir que se den pasos atrás en normas ya conseguidas, y luchar por que se apliquen.
La jornada se clausuró con un participativo e interesante debate abierto al público.
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